Tal y como informa La Vanguardia, Guadalupe Balaguer ha asumido recientemente el cargo de presidenta de la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales (CIMA), sucediendo a Cristina Andreu. Este cambio en la dirección de una de las organizaciones más influyentes en la industria audiovisual española marca un nuevo capítulo en la lucha por la igualdad de género en el cine y los medios. Balaguer, con una vasta experiencia en el sector y un compromiso firme con la representación equitativa, se enfrenta al desafío de continuar el trabajo realizado por Andreu, mientras aporta su visión y liderazgo para avanzar en la misión de CIMA.
CIMA ha jugado un papel crucial en la promoción de la igualdad de oportunidades para las mujeres en la industria del cine y los medios audiovisuales. Bajo la dirección de Cristina Andreu, la asociación ha logrado importantes avances en la visibilidad y el reconocimiento de las mujeres en este campo. Sin embargo, el camino hacia la igualdad plena está lejos de ser recorrido, y la llegada de Guadalupe Balaguer al frente de CIMA es vista como una oportunidad para reforzar y ampliar estos logros. Balaguer ha destacado la importancia de seguir trabajando en políticas de igualdad que no solo beneficien a las mujeres que ya están en la industria, sino que también inspiren y apoyen a las nuevas generaciones de cineastas.
Según El Periódico, la elección de Balaguer como presidenta es significativa en varios aspectos. Por un lado, refleja la creciente presencia de mujeres en roles de liderazgo dentro de la industria audiovisual, un sector históricamente dominado por hombres. Por otro lado, su nombramiento es un testimonio del reconocimiento a su carrera y a su compromiso con la igualdad de género. Balaguer ha sido una defensora activa de la inclusión y la diversidad en el cine, y su presidencia en CIMA es una extensión natural de ese trabajo. Su enfoque no solo se centrará en aumentar la representación de las mujeres en las producciones cinematográficas y televisivas, sino también en garantizar que estas representaciones sean auténticas y libres de estereotipos.
Kinótico también informa que uno de los principales desafíos que Balaguer deberá afrontar es la implementación de medidas que aseguren una mayor equidad en la industria. Esto incluye no solo la promoción de más mujeres en roles creativos y técnicos, sino también la creación de un entorno que favorezca la igualdad salarial y las oportunidades de crecimiento profesional para las mujeres. Además, la nueva presidenta de CIMA ha señalado la importancia de trabajar en colaboración con otras organizaciones y entidades del sector para desarrollar iniciativas que impulsen la formación y el acceso de mujeres a puestos de liderazgo.
Otra área clave en la que Balaguer planea enfocarse es la visibilización de las mujeres cineastas en los festivales y eventos de cine. Aunque ha habido avances, las mujeres siguen estando subrepresentadas en estos espacios. Balaguer ha mencionado que uno de sus objetivos será aumentar la participación de las mujeres en festivales de cine tanto a nivel nacional como internacional, asegurando que sus obras reciban el reconocimiento que merecen. Este enfoque en la visibilidad es crucial para cambiar la narrativa en torno a las mujeres en el cine y para inspirar a futuras generaciones de creadoras.
La transición de liderazgo en CIMA también llega en un momento crucial para la industria audiovisual, que está atravesando cambios significativos debido a la digitalización y la transformación de los modelos de distribución y consumo. Guadalupe Balaguer ha expresado su intención de adaptar las estrategias de la asociación a este nuevo contexto, asegurando que las mujeres cineastas estén preparadas para enfrentar los retos y aprovechar las oportunidades que estos cambios traen consigo. Esto incluye el apoyo a nuevas formas de narrativas y formatos, así como la promoción del uso de plataformas digitales para la difusión del trabajo de mujeres en el cine y los medios.
En este sentido, Balaguer también ha enfatizado la importancia de la educación y la formación continua. La industria audiovisual es un campo en constante evolución, y es esencial que las mujeres tengan acceso a las herramientas y recursos necesarios para mantenerse competitivas. La nueva presidenta de CIMA ha señalado que fortalecerá los programas de formación y mentoría dentro de la asociación, con el objetivo de capacitar a las mujeres para que puedan ocupar roles clave en todas las áreas del cine y los medios.
Imagen de Mianima